miércoles, 18 de mayo de 2011

CHISTES

Por: Emelina Costa

El padre, enfurecido, le pega una ronca descomunal a su hijo adolescente por llegar a casa ya entrada la madrugada.

Es que verás, papá, he tenido mi primera experiencia sexual.
¡ah hombre! Eso lo cambia todo. Venga, siéntate y cuéntale a tu padre con confianza cómo ha ido…
¡Sí! ¡el culo lo tengo yo para sentarme ahora!

Por: Conchita Vicente

Van dos a confesarse
Y el cura le pregunta a uno de ellos:
    ¿Cuántos dioses hay?
Y le contesta:
  mmm…3.
     3? ¿Cuántos hay? Le pregunta al otro.
    mmm…1.
Y el amigo le dice:
   No se ha conformado con 3 con que vas tú y le dices 1.

Por: Conchita Martínez

Llega el marido borracho a las cinco de la mañana. Le abre la María y le dice:
Pepe ¡tú me matas! ¡a mí me entierran!
Y le dice él:
    Pues para hacer hoyo vengo yo.

Por: Conchita Martínez
           
Le dice el ginecólogo a una paciente:
¿Y cómo es usted virgen si ha tenido cuatro matrimonios?
A lo que la mujer responde:
   Pues por el oficio de mis cuatro exmaridos. El primero era arquitecto, todo proyectos y proyectos; el segundo era político, todo promesas y más promesas; el tercero funcionario, todo para mañana, todo para mañana… y el cuarto, el cuarto  trabajaba en hacienda, todo dar por culo, dar por culo y dar por culo!!

Por: Juan Manuel Piña

¿En qué se parece un cura a un árbol de navidad?
... En que los dos tienen pelotas de adorno.

Por: Juan Manuel Piña

¿Cómo se dice embarazada en japonés?
... Cacho Chin Condón

Por: Juan Manuel Piña

(Entre amigas)
    Pues a mí me gustan los hombres como el café.
  Ya sé… morenos, fuertes y calientes.
  No, cuatro veces al día.

Por: Carmen Villena Rico

Fue una señorita a  subirse al tranvía y dos milicianos la quieren detener. Ella dice:
A mí ¿por qué?
Porque lleva usted a Franco en la liga.
Porque no han visto a Negrín, que lo llevo más arriba.

Por: María Sánchez

Era un hombre tan rico, tan rico, tan rico... que se lo comieron!!!

Por: María Sánchez

Un amigo le dice a otro:
Voy a echarle estiércol a las fresas.
Pues yo le echo nata!!

Por: Rita Gómez

Dos jubilados hablan de sus nietos:
El mío con 6 años sabe pintar, leer y tocar el violín.
Pues el mío tiene 6 meses y ya sabe lo cara que es la vida, que los impuestos no paran de subir, que las hipotecas se encarecen y lo que cuesta encontrar trabajo.
¡Qué bárbaro! Y ¿cómo lo sabe?
Pues porque no para de llorar noche y día.

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