EL ALZHEIMER
Los días 23 y 30 de octubre 2017 hemos
podido aprender sobre esta demencia en las Escuelas de Mayores de la MLV
gracias a la participación de AFA Miguel Hernández (Asociación de Familiares de
Enfermos de Alzheimer de Orihuela) que han realizado distintos talleres
informativos y participativos sobre esta dolencia en los diferentes municipios
de la Mancomunidad.
La participación y asistencia ha sido muy
amplia, por lo que entendemos que resulta ser un tema que preocupa e interesa.
Por eso vamos aquí a ofrecer una información y recomendaciones sobre esta
demencia, para que podáis estar informados/as.
Lo primero que tenemos que decir es que
la prevención de su aparición, o mejor dicho, retrasar en todo lo posible su
aparición y atenuar en la medida de lo posible sus efectos es uno de los
objetivos que persigue este servicio que se ofrece de forma gratuita a todas
las personas mayores o dependientes de la Mancomunidad La Vega, en cada uno de
los municipios (Redován, Algorfa, Jacarilla, San Miguel y San Carlos).
Las Escuelas de mayores tienen como
misión trabajar a favor de las personas mayores, evitando su aislamiento
social, promoviendo su participación comunitaria y fomentando el desarrollo de
habilidades sociales y personales que favorezcan un buen estado de salud
integral de la persona (mental, físico y social). Por este motivo, acudir a
nuestras Escuelas de Mayores es una herramienta muy interesante para trabajar
la prevención del desarrollo de enfermedades cognitivas o demencias como el
Alzheimer.
Hay muchos tipos de demencia, aunque el Alzheimer es la
forma más común. Demencia es un término general para describir la pérdida de
memoria y de otras habilidades intelectuales y es tan severa que interfiere con
la vida cotidiana del individuo.
Aunque existen muchos síntomas,
la mayoría de las personas experimentan pérdida de memoria severa que afecta
las actividades diarias y la habilidad de gozar pasatiempos que la persona
disfrutaba anteriormente.
Otros síntomas son confusión,
desorientación en lugares conocidos, colocación de objetos fuera de lugar, y
problemas con el habla y/o la escritura.
Estos
síntomas van empeorando progresivamente el estado de la persona afectada.
Si
dividiéramos el progreso de la enfermedad en tres fases, los síntomas de cada
una de ellas serían los siguientes:
Fase 1:
Inicial
-
Se ve
afectada la memoria a corto plazo (pequeños y repetitivos olvidos).
-
Pérdida
del vocabulario y de la fluidez verbal (olvidarse de palabras, no acabar de
recordarlas).
-
Aparece
dificultad para prestar atención o interés en las cosas.
-
Desorientación
temporal (¿día? ¿hora?)
-
Se
producen cambios en la personalidad (aparece ansiedad, tristeza, posible
depresión…)
-
Hay una
evitación de actividades sociales o de acudir a lugares conocidos (normalmente
porque la propia persona ya reconoce que tiene un problema y prefiere quedarse
en casa para evitar riesgos).
Fase 2:
Intermedia:
-
La memoria reciente y de hechos pasado se ve
afectada.
-
No se
acaban las frases, hay repeticiones comunicativas.
-
Agnosia:
no se reconoce a personas u objetos, o se siente confusión.
-
Alteración
del comportamiento: reacciones inesperadas o bruscas.
-
Desorientación
espacio-temporal
-
Dificultad
al deglutir (tragar)
-
Incontinencia
urinaria
En esta
fase no se les puede ya dejar salir solos/as, sin supervisión.
Fase 3:
Avanzada:
-
En
comunicación sólo dicen monosílabos incoherentes.
-
Falta
total de autonomía.
-
Aparición
de úlceras por presión, debido a posturas fijas.
-
Incontinencia
total (urinaria y fecal).
¿A quién
puede afectar esta demencia? Pues nadie estamos exentos, pero los factores de
riesgo más importantes son los siguientes:
Edad
El
factor de riesgo más alto para Alzheimer es la edad avanzada. Uno de cada nueve
personas mayores de 65 años tiene Alzheimer.
Otro
factor es la historia familiar. La investigación científica ha comprobado que
aquellas personas que tienen un padre, hermano o hermana con Alzheimer tienen
dos o tres veces más posibilidades de desarrollar la enfermedad. El riesgo
aumenta conforme más miembros de la familia tienen la enfermedad.
Los
científicos han identificado un gen que aumenta el riesgo de Alzheimer pero
esto no garantiza que la persona va a desarrollar la enfermedad. La
investigación científica también ha revelado que algunos genes no muy comunes
casi garantizan el que una persona desarrolle Alzheimer. Estos genes han sido
encontrados en unos pocos cientos de familias extensas alrededor del mundo y
sólo son responsables por menos de 1 por ciento de todos los casos de
Alzheimer.
Al tratarse de una demencia de largo
recorrido uno de los principales perjudicados son las personas de alrededor,
los llamados cuidadores o cuidadoras. Al avanzar la enfermedad, el paciente irá
perdiendo su capacidad para cuidar de sí mismo/a y realizar muchas actividades
cotidianas, y eso conllevará que la figura del cuidador/a se hará más
necesaria.
Esta persona que se ocupe de los cuidados
tendrá que asistir a la persona enferma en sus actividades básicas diarias
(bañarse, vestirse, comer…) pero también tendrá que lidiar con otros problemas
que pueden llegar a ser estresantes (cambios de conducta, dificultad en el
lenguaje…).
A continuación mostramos unos consejos
para el día a día con personas con Alzheimer:
CONSEJOS PARA FAVORECER LA COMUNICACIÓN
-
Utilizar palabras sencillas y
frases cortas.
-
Usar un tono de voz tranquilo
-
Hacerle preguntas directas,
no de múltiples respuestas.
-
Pedirle las cosas de una en
una
-
Hablar despacio y darle
tiempo a pensar y responder.
CONSEJOS PARA UNA BUENA ALIMENTACIÓN
-
Trabajar con rutinas: siempre
comer a la misma hora y en el mismo lugar.
-
Fomentar que coma solo
siempre que pueda, vigilarle mientras lo hace.
-
Utilizar cañitas o tazas con
tapa para evitar que se vuelque el vaso.
-
No descuidar dar de beber al
enfermo de forma periódica para evitar la deshidratación.
-
Si no puede utilizar los
cubiertos servir los alimentos cortados.
CONSEJOS PARA LA HIGIENE PERSONAL
-
Escoger horas que permitan
realizar la tarea sin prisas.
-
Preparar todo lo que va a
necesitar antes de empezar.
-
Dejar que realice todas las
tareas que sea posible por si mismo.
-
Secar bien toda la piel,
especialmente los pliegues, para evitar infecciones.
-
Utiliza un cepillo de dientes
suave.
CONSEJOS PARA LA INCONTINENCIA
-
Mantener una rutina para
llevar a la persona al baño a las mismas horas.
-
Acompañarle al baño cada tres
horas para evitar escapes.
-
Vestirle con ropa fácil de
quitar.
-
Adoptar una actitud
comprensiva ante la persona si se muestra avergonzada por lo sucedido.
-
Limitarle la cantidad de
líquidos por la tarde-noche para evitar la incontinencia nocturna.
-
Llevarle al baño antes de
salir de casa.
CONSEJOS PARA AYUDARLE A VESTIRSE
-
Organizar el armario en
relación con la época del año.
-
Limitar el número de prendas,
demasiadas puede generar ansiedad o confusión.
-
Escoger ropa cómoda y fácil
de quitar y de poner.
-
Dejar que haga todas las
tareas que pueda, nosotros le ayudaremos en el resto.
CONSEJOS SI SE PONE LA PERSONA AGRESIVA
-
Mostrar calma y no levantar
el tono de voz
-
Alejarle de lo que le esté
produciendo esa reacción
-
Buscar el contacto visual,
cogerle de las manos, mostrarle cariño y serenidad.
-
Distraerle, cambiarle de
actividad.
CONSEJOS PARA AUMENTAR LA SEGURIDAD EN
CASA
Cocina:
-
Sustituir la cocina de gas
por una eléctrica o instalar aparatos detectores de gas.
-
No utilizar cerillas, sino
mechero eléctrico.
-
Utilizar un programador
automático de la temperatura del agua.
-
Guardar o retirar objetos
punzantes o cortantes. También los productos tóxicos de limpieza.
Dormitorio:
-
Retirar alfombrillas y
objetos que puedan estar por medio.
-
Evitar camas altas, pegarlas
a la pared o poner barandillas de seguridad.
-
Poner lamparilla de noche de
fácil acceso y estable. A veces es recomendable dejar una luz piloto encendida.
Baño:
-
Eliminar cerrojos o medios de
bloqueo de las puertas.
-
Poner alfombrillas fijadas al
suelo, instalar antideslizantes en la ducha y asideros en la bañera.
-
Retirar del baño todos los
aparatos eléctricos.
-
Guardar bajo llave los
elementos del botiquín.
-
Favorecer que realice la
persona su propia higiene en todo lo posible, pero con vigilancia.
Para más información puedes contactar con
AFA Miguel Hernández (Asociación de familiares y enfermos de Alzheimer):
teléfonos 96 530 21 08 / 625 065 355
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